Consejos para el estudio del violín
El alumno debe tener en cuenta los siguientes aspectos que son muy importantes y deberá cuidar la actitud y mentalidad en la práctica diaria, esperando que les sea de utilidad. Se recomienda leerlos antes de iniciar el estudio diario hasta que se aprendan, se vuelvan un hábito y un reflejo condicionado.
El Violín
El violín es llamado el Rey de los instrumentos, su inmensa popularidad es porque posee un sonido y variedad tonal
que se asemeja al timbre de la voz humana. Se afirma que el violín adquirió su forma actual en el siglo XVI, entre los más famosos fabricantes italianos están: Gasparo da Saló (1555-1610) y Juan Pablo Maggini (1590-1640) y el arte de construir violines llegó a la perfección a fines del siglo XVII en un pequeño pueblo llamado Cremona donde artistas como Nicolás Amati, Pedro y José Guarneri de Jesu, Juan Bautista Guadagnini, Carlos Bergonsi, Jacob Steiner (tirolés que vivió en Cremona) y el más grande de todos, el célebre Antonio Stradivarius.
¡No estudies......no practiques.....! “cuando estés cansado” ¡Siempre piensa en lo que estás practicando! La razón es que todas las reglas importantes deben recordarse y seguirse durante el estudio diario.
• No hay utilidad en estudiar algo y aprenderlo incorrectamente.
• Pon estrictamente atención en el correcto uso de las arcadas que estén escritas: detaché, legato, portato, staccato, spiccato, martelé, etc.
• Si se descuida y no se observan siempre te verás con dificultades al tocar.
• Cuando vengas a clase no des excusas, “Hazlo bien”. Pararse derecho, el peso del cuerpo se reparte en los pies, sin embargo se hace el cambio de peso o de balance al pie izquierdo y al derecho para descansar.
• Permanecer quieto, con libertad y tranquilidad.
• Siempre mantén alineados los hombros y relajados.
• La respiración debe ser libre y natural, ésto hace que la producción del sonido sea mejor y evita el dolor de espalda.
• El violín se sostiene con la barba y el hombro “no se carga con la mano izquierda” se mantiene horizontal a la altura de la nariz o de la boca.
• Todos tus movimientos deben ser naturales, nos hacer gestos, ni hacer movimientos innecesarios del cuerpo.